Los incendios forestales en el municipio de Riberalta han provocado la deforestación de al menos 3.500 hectáreas, según reportes de autoridades locales y brigadas de emergencia.

Hasta la fecha se contabilizan 50 focos de calor activos en la región, lo que mantiene en alerta a comunidades rurales y productores, que ven amenazadas sus parcelas agrícolas y sus medios de vida.
Bomberos voluntarios, comunarios y personal de Defensa Civil trabajan en distintas zonas para contener el avance de las llamas, aunque las altas temperaturas, la sequía prolongada y los vientos intensos dificultan las labores de mitigación.
Riberalta, conocida como la capital de la Amazonía boliviana, enfrenta una de las temporadas más críticas de los últimos años. Las autoridades advierten que, de no intensificarse las acciones de control, el impacto ambiental y social podría agravarse en las próximas semanas.
Por: Brian C. Dalenz Cortez

