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El tipo de cambio paralelo bajó este martes hasta Bs 9,98, el nivel más bajo en meses, impulsado por expectativas positivas tras el cambio de gobierno, la aprobación de créditos internacionales y señales de apertura económica. Expertos advierten que la tendencia podría ser temporal hasta conocer las primeras medidas del nuevo Ejecutivo.
A solo tres días de la posesión de Rodrigo Paz como presidente de Bolivia, el dólar paralelo registró una caída inédita y se cotizó este martes hasta en Bs 9,98, según un recorrido realizado por diferentes casas de cambio en La Paz.
En algunos puntos del eje troncal, el precio de compra incluso osciló entre Bs 10, Bs 10,10 y Bs 10,20, con algunas operaciones puntuales por debajo de Bs 10, dependiendo del monto. La disminución marca un punto de inflexión en el comportamiento del mercado cambiario, que llegó a tocar Bs 15 durante el balotaje, en medio de la incertidumbre política.
El economista Fernando Romero explicó que esta baja responde a un conjunto de factores coyunturales: el superávit comercial de septiembre, la aprobación de más de 1.000 millones de dólares en créditos internacionales, la llegada de combustibles al país y las señales de apertura económica y diálogo con inversionistas y organismos internacionales.
“Hay optimismo, pero es una calma frágil. Este descenso puede continuar unos días más hasta que el nuevo Gobierno anuncie sus primeras medidas. Luego podríamos ver correcciones, sobre todo si se modifica el subsidio a los combustibles”, indicó Romero.
Por su parte, el analista financiero Marcelo Rocha coincidió en que el cambio de gobierno ha modificado las expectativas económicas. “El nuevo presidente ha marcado una apertura a los mercados internacionales y una reducción de aranceles. Eso genera confianza y menor demanda inmediata de dólares”, explicó.
Rocha añadió que la tendencia también está influenciada por un comportamiento psicológico del mercado. “Muchas personas que compraron dólares a Bs 12 o 15 están vendiendo ahora para evitar pérdidas. El mercado es especulativo y se mueve por expectativas más que por fundamentos”, subrayó.
Entre los factores externos, destacó que a nivel global los bancos centrales están aumentando sus reservas en oro en lugar de divisas, lo que ha reducido la demanda de dólares. Además, la reunión del presidente Paz con organismos como la CAF y el BID, que anunciaron apoyo financiero por más de $us 3.000 millones, generó un efecto de confianza inmediata.
Sin embargo, los analistas coinciden en que el valor del dólar podría estabilizarse alrededor de los Bs 10 en el corto plazo, y luego repuntar hacia fin de año debido al incremento del consumo y las importaciones por las fiestas.
“Todo dependerá de cómo el Gobierno maneje la transición de los subsidios. Si las medidas generan certidumbre, el dólar podría mantenerse estable. Si hay señales contradictorias, volverá la presión alcista”, advirtió Romero.
En las calles, la sensación es de expectativa. Los operadores de cambio aseguran que la demanda se mantiene alta y que la estabilidad “aún no está consolidada”. Mientras tanto, el Banco Central de Bolivia reiteró que trabaja para “mantener la tendencia a la baja”, aunque sin establecer una meta fija.
Por: Joel Poma Chura - Comunicación Cecasem
