El Ministerio de Medio Ambiente y Agua informó que, durante esta gestión, Bolivia registró una reducción significativa en la superficie afectada por incendios forestales, alcanzando aproximadamente 300 mil hectáreas, una cifra muy inferior a las más de 8 millones de hectáreas quemadas durante el mismo periodo del año pasado.

El ministro Álvaro Ruiz explicó que este descenso se debe a un mayor nivel de coordinación entre las instituciones del Estado, los bomberos de las Fuerzas Armadas, la Policía Boliviana, los bomberos voluntarios y la ciudadanía organizada, que ha asumido un papel más activo en la detección y respuesta temprana ante el fuego.
“Este año no estamos pasando de las 300 mil hectáreas. El año pasado llegamos a 8 millones. Esto es resultado de un buen nivel de coordinación entre los equipos de respuesta y la población, que ahora se alarma y apoya en la lucha contra el fuego”, afirmó Ruiz en declaraciones a BTV.
La autoridad destacó que los resultados reflejan el trabajo conjunto entre el Gobierno nacional, los gobiernos subnacionales, diversas plataformas ambientales y la cooperación internacional, lo que ha fortalecido la capacidad de prevención y control frente a los incendios forestales.
Ruiz subrayó que la prevención, la coordinación interinstitucional y la participación ciudadana son pilares esenciales para proteger los ecosistemas del país y enfrentar de manera más efectiva los desafíos climáticos que afectan a Bolivia.
Redactado por Alexander Zegarra - Comunicación

